Un estilo músical se entiende como un modo de ejecutar la música y aunque relacionamos este concepto a la utilización de instrumentos concretos para este fín, es un rasgo mas del proceso creativo. Existen varios factores que nos hacen distinguir las diferentes corrientes musicales, y comprendemos desde la diversidad la importancia de referencias que consideramos clásicos. Recurriendo al siginificado literal de la palabra “clásico” vemos que es algo que perdura y deja huella, algo digno de imitación, de esta manera la definición puede ser aplicable tanto a aquella antigua música que alardeaba de virtuosismo en cortes y palacios, como aquella que la tomó como ejemplo y la reintepretó originando algo nuevo, algo que lógicamente se llamó Nueva Ola y que ocurrió hace 40 años, también hoy parte de la historia.
Los discos que quedarón para ilustrar ese momento son aquellos que que hoy consideramos esenciales para entender los continuos cambios evolutivos e involutivos de la música. Llegando a este momento y celebrando estos 40 años de cambio, synthwave, darkwave, coolwave y otras waves, miro atrás y hago un ejercicio comparativo repasando la trayectoria de aquellos que dieron vida a esta reconversión neo-clásica, y que con la mayor dignidad continúan demostrando ese gran potencial que ni el paso del tiempo ni las circunstancias han conseguido borrar.
Una necesidad de retomar la historia desde otro plano paralelo y adaptarla a un incierta realidad se ha instalado de nuevo y se ha apoderado del arte, de la música, sin duda un momento único. Así pues, del mismo modo que ahora deseamos borrar el mas reciente pasado, también necesitamos recuperar ese tiempo perdido y aceptando todo aquello que sea nuevo, para así curar las heridas consultamos a los heroes de la New Wave, ellos nos revelan el secreto del éxito en la lucha, de la supervivencia y nos administrarán esa vacuna que nos inmunizará definitivamente para no morir en el intento, para continuar.
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Saludos sintéticos.